Por donde respiran las tortugas

Como las tortugas son de sangre fría, su nivel de actividad es dependiente de la temperatura exterior. Son mucho más activos en temperaturas cálidas y menos activos en tiempos fríos. Conforme bajan las temperaturas, bajan los escenarios de actividad, de la misma el metabolismo de las tortugas. En el momento en que baja la temperatura, las tortugas entran en hibernación. Ciertas tortugas hibernan, sin respirar, en el lodo del fondo del estanque.

Mientras que hibernan, no se mueven y su ritmo cardiaco es retardado. Ellos «respiran» anaeróbicamente, usando la grasa guardada a lo largo de los meses de verano. Este desarrollo sostiene bajo el metabolismo y la función celular de las tortugas, pero resulta en la acumulación de ácido láctico. Los caparazones de las tortugas dejan libre carbonatos en sus sistemas, anulando el ácido y eludiendo que se vuelva mortal.

Las tortugas respiran por pulmones

Las tortugas son vertebrados y tienen pulmones por los que respiran de la misma los mamíferos o las aves. Sus pulmones y el resto de órganos están en el caparazón, en verdad las costillas están fusionadas por la parte interior con el caparazón.

En contraste a los humanos, las tortugas no tienen la posibilidad de expandir su caja torácica para dejar que el aire entre y salga.

¿De qué manera respiran las tortugas marinas?

Las tortugas marinas tienen que salir a la área para inhalar aire por la nariz. El aire viaja mediante la laringe y la tráquea hasta llegar a los pulmones.

Los pulmones están bajo el caparazón, pero no tienen diafragma. Gracias a la morfología de su cuerpo, las tortugas marinas no tienen respiración torácica, lo que quiere decir que su caparazón no puede extenderse y contraerse como nuestras costillas.

Capacidad de acumulación de oxígeno

En el momento en que una tortuga se sumerge a poca hondura, la mayoría del oxígeno se amontona en los pulmones, lugar desde el que pasa a la sangre y los tejidos. No obstante, para las inmersiones profundas, las tortugas marinas dependen del almacenaje de oxígeno en la sangre y los músculos. Las tortugas marinas (eminentemente la tortuga laúd) tienen un sinnúmero de hemoglobina y glóbulos colorados y mioglobina en sus músculos, lo que les deja guardar un sinnúmero de oxígeno en el cuerpo que está libre para los tejidos a lo largo de las inmersiones profundas. Los pulmones asimismo tienen una enorme área para el trueque de gases, lo que posibilita que el oxígeno llegue a la sangre con cada respiración. Esto causa que la respiración de una tortuga marina sea considerablemente más eficaz que la nuestra.

Tortugas marinas

El caparazón de estas tortugas está hecho de tejido cartilaginoso (asimismo tienen un diseño de acordeón) con lo que tienen mucho más elasticidad al respirar. Los músculos abdominales y pectorales son los que intervienen en la inhalación de aire y al exhalarlo comprime los pulmones con el estómago y las vísceras.

Estas tortugas han creado diversos tipos de respiración agregada: